ONU-Sáhara: Firme apoyo del comité de los 24 al plan de autonomía marroquí

La iniciativa marroquí de autonomía para el Sahara recibió el lunes en la sede de la ONU en Nueva York, un firme apoyo de la mayoría de los Estados Miembros de la Comisión de los 24 (C24), un órgano subsidiario de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
La iniciativa de autonomía que se presentó a la ONU en 2007, es descrita como ya es sabido de «seria y creíble» en varias resoluciones del consejo de seguridad, y recibe un soporte in crescendo dentro de la comunidad internacional.
Los embajadores y representantes de Senegal, Gabón, Costa de Marfil, Sierra Leona, Guinea, Granada, Dominica, Antigua Barbuda, Santa Lucía, St. Kitts y Nevis y Papúa Nueva Guinea de hecho, expresaron en esa reunión, su pleno apoyo al plan marroquí de autonomía presentado como parte del proceso político bajo el patrocinio exclusivo de las Naciones Unidas para la solución definitiva del conflicto territorial sobre el Sahara marroquí.
También elogiaron los esfuerzos de la ONU para alcanzar una solución política negociada mutuamente aceptable a la controversia regional del Sahara, con la plena participación de las partes y los Estados vecinos en particular Argelia, cuyo sesgo en este conflicto está probado.
Además, el día del lunes fue especialmente marcado por la participación por primera vez en la reunión anual del C24, de dos electos saharauis Mhamed Abba y la señora Ghalla Bahiya, en calidad de vicepresidentes respectivamente de las regiones de El Aaiún-Sakia El Hamra y Dakhla-Oued Eddahab.
Los dos representantes del Sahara marroquí, cuya presencia fue recibida por varios oradores, expusieron ante los miembros del C-24, el carácter transparente y inclusive de su elección, su calidad de representantes genuinos de las poblaciones del Sahara marroquí, las prerrogativas  de los consejos regionales al servicio de las poblaciones del Sahara y los esfuerzos realizados por Marruecos para el desarrollo socioeconómico de las provincias del sur del Reino.
Obviamente, la invitación de los dos saharauis elegidos en la reunión anual del C-24, no era del agrado de los diplomáticos argelinos y sus protegidos del Polisario que han afirmado durante mucho tiempo ser los «representantes únicos y legítimos» de la población saharaui.