Pocas cosas parecen filtrarse de las negociaciones directas que se celebran actualmente entre el Frente Polisario y el Reino de Marruecos en Manhasset, el movimiento separatista sostenido por Argelia, continuando por revindicar un retorno al plan Baker que comprendia una fase transitoria, seguida de un referéndum. El Reino de Marruecos, conformemente a lo que ha sido relatado por los medios de comunicación internacional, rechaza salirse del marco fijado por la iniciativa de autonomia, que representa la unica salida políticamente viable para acabar por un conflicto que dura desde hace cerca de 33 años.En efecto, Marruecos, manifiesta estar dispuesto a discutir del contenido de su plan de resolucion; pero se ha visto opuesto por un silencio ensordecedor de parte del Frente Polisario, que continua de preconizar una solucion imposible a implementar, siempre de los votantes eventuales ponga problemas.
La verdadera encrucijada de està ronda de negociaciones, parece estar màs en el lado Argelino, que rechaza salir del bosque y a ser claramente identificado como siendo el componente màs importante del conflicto. Està situación, inexplicable a ojos del desafio economico que el Maghreb debe afrontar para asegurar su desarrollo, parece sin embargo empezar a evolucionar, con màs y màs voces Argelinas que respaldan la busqueda de una solucion politica al conflicto, y que respete la integridad territorial Marroquí, y que pueda conducir al establecimiento de una dinàmica de normalizacion de relaciones entre Argel y Rabat. Estos ultimos, como tàn bién los dos sàben, han conocido evoluciones a regañadientes , Argelia que quiere ser el lider incontestable del Maghreb, asi como asegurar la salida hacia el Atlàntico al Hierro de Dar Jbilet, que no seria nada rentable si hubiera sido evacuado hacia el norte. Es pués en una situación extremadamente lamentable donde se encuentran los pueblos del Maghreb, como el conjunto de la region,a falta de un "alma de buena voluntad" a Argel de decidir de tomar el asunto de buena fé.
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