La dirección del Polisario esperaba todo salvo la creación de un partido político por un grupo de jóvenes opositores saharauis. Es la primera vez en los anales del Polisario y un desafío al omnipresente líder del Frente, Mohamed Abdelaziz que ha sido reelegido para un nuevo mandato de cuatro años.
Llamado Rassemblement Sahraui Democrática (RSD), el nuevo partido político incluye no sólo a los saharauis de los campamentos de Tinduf, sino también a los establecidos en Argelia, Mauritania, España y en las provincias del sur de Marruecos.
El RSD quiere ser un partido de oposición que ofrece «una alternativa democrática» al Polisario, y su objetivo es «poner fin al estancamiento en el que el Polisario ha congelado la cuestión del Sahara», abriendo el camino para «una solución política consensual en interés de los países del Magreb».
«Hoy en día creemos que el Polisario no nos representa más. El hecho de que sigue pretendiéndolo es pura farsa. Eso para poner fin a este engaño masivo que el RSD ha sido creado», dijo uno de los miembros fundadores del RSD, Salah Khatri que es originario de los campamentos de Tinduf, pero que en la actualidad vive en Francia.
«Después de 35 años de poder absoluto y arbitrario ejercido con el apoyo benevolente de Argelia, el Polisario se ha convertido en un problema para los saharauis», se indignó Khatri, y agregó que su partido «llama a la paz, a la libertad de opinión y de expresión en los campamentos y al derecho a manifestarse y formar asociaciones y partidos políticos «.
El RSD, añadió, también milita por el respeto de los derechos humanos, la participación de todos los segmentos de la población de los campamentos de Tinduf, en la toma de decisiones y requiere el establecimiento de medios de control de l distribución de la ayuda humanitaria extranjera.
Conviene recordar que la dirección del Polisario que administra con mano de hierro los campamentos de Tinduf con el apoyo y la bendición de las autoridades y el ejército argelino, siempre ha prohibido sin discernimiento, el nacimiento de los movimientos de oposición o de formaciones opuestos a su línea de conducta y su tésis separatista.