La apropiación indebida de la ayuda humanitaria a la población saharaui en los campamentos de Tinduf estaban bajo fuerte sospecha durante años, pero es un informe de la UE quién dejó claro al señalar la responsabilidad de Argelia y del Polisario.
El informe de la OLAF, la oficina antifraude de la Unión Europea, revelado el 22 de enero, es formal. Gran parte de la ayuda internacional se desvía desde la llegada de la carga al puerto argelino de Orán. La clasificación se hace de inmediato entre «lo que debería llegar y lo que puede ser desviado», dice la Oficina Europea.
Los productos alimentarios de buena calidad de la ayuda internacional se intercambian con otros de menor calidad, antes de ser vendidos en el mercado negro, revela la encuesta europea. Peor aún, «los productos de una empresa avícola financiados por la ayuda internacional se venden, y no dados a los refugiados», explica la OLAF. Revelaciones embarazosas para Argelia, así como para el Polisario, el frente, que compite con Marruecos la soberanía sobre el Sáhara Occidental desde territorio Argelino.
El informe que acaba de ser revelado, fue redactado en 2007 después de una larga investigación llevada por la UE desde 2003, que ofrece € 10 millones cada año desde 1975. Pero el informe se mantuvo en secreto durante más de siete años sin que se sepa la razon. Explicàndose ante el Parlamento Europeo, la comisaria europea del Presupuesto Kristalina Georgieva simplemente dijo que el informe se había «olvidado».
Una de las razones que pueden explicar esta extraña ley del silencio es que el informe contiene los nombres de los responsables argelinos involucrados con los dirigentes del Polisario en este tráfico a gran escala. Sin embargo, su identidad se todavia se mantiene secreta, el recorrido del informe que contiene los nombres fué ocultado de color negro antes de que se haga público.
La encuesta pone de relieve, sin embargo, que estos desvios han sido posibles debido a la «sobreestimacion del número de refugiados y, por tanto, de la ayuda proporcionada.» Argelia stablecia a 155.000 el número de saharauis que viven en los campamentos de Tinduf, sin posibilidad de que la comunidad internacional pueda garantizar ese número. De hecho, según un informe de la UE «ni Argelia ni el Frente Polisario acordarón que un censo de la población de los campamentos se organizará.»