Los responsables argelinos entraron en pánico cuando ven acercarse la fecha de la celebración del Foro de Crans Montana, temiéndo que està reunión programada del 12 al 14 de marzo en Dakhla, una ciudad en el Sáhara Occidental, firme el reconocimiento internacional del éxito de Marruecos en la transformacion acertada de un territorio desértico en un lugar de prosperidad y de acojida.
El Foro Crans Montana es una reunión de renombre mundial, que reúne a los jefes de Estado y de Gobierno, los responsables políticos, operadores económicos y ONG internacionales. Y aquí es donde radica el problema. Argelia teme más que nada que un encuentro de esta magnitud sea una oportunidad para disipar su apoyo al Frente Polisario que lucha desde Argelia por la independencia del territorio del Sáhara Occidental.
Peor aún, Argel pronóstica de antemano que la reunión del Foro de Crans Montana en Dakhla supondrà un golpe duro para los proyectos de la república saharaui. Una entidad autoproclamada en la década de los 70, en asociación con el Polisario, Gadafi y algunos países africanos, cuyos dirigentes fueron movilizados en el momento a golpe de petrodólares.
Los responsables argelinos presienten que la organización de este foro en la ciudad de Dakhala será un trampolín que sin duda mejorará la credibilidad del plan de autonomía propuesto por Marruecos en el territorio del Sáhara Occidental. Sobre todo que la actuación de las autoridades marroquíes permitió un rápido desarrollo de esta ciudad turística, en la misma forma que las otras ciudades del territorio de otros lugares.
De simples pueblos del desierto en los años 70, se han transformado en menos de 40 años en espacios llenos de vida y de actividades. El presidente fundador del Foro de Crans Montana, Jean-Paul Carteron comentó, la celebración de la CMF en esta ciudad. «Dakhla es esencialmente un modelo para el futuro de Marruecos y África, y goza de una posición estratégica excepcional como encrucijada económica.»